Casa de Nadie es el segundo libro del escritor argentino Laureano Debat, el cual desde su anuncio le ha significado la atención de los medios españoles y latinoamericanos por narrar la historia de una madre y su hija que ejercen la prostitución en su piso de Barcelona, espacio que además le alquilaban a Debat, quien se volvió testigo y cómplice de sus caseras.
Tras 10 años de aquella experiencia, Laureano Debat reaparece en el ámbito literario por todo lo alto y con un segundo libro que lo ratifica como una de las voces en lengua española a la que hay que prestarle mayor atención, aunque desde ya se augura que esta nueva producción tiene asegurado un buen número de lectores.
1. Casa de Nadie narra tu experiencia como inquilino en el piso donde una madre y su hija practican la prostitución. ¿Esas dos féminas ya se han comunicado contigo? ¿Cómo han tomado que las hayas retratado en tu novela? ¿Les harás llegar un ejemplar?
Hace años que no hablo con ellas. La última vez que contacté con Sonia fue para avisarle, justamente, que estaba escribiendo este libro y me respondió que “muchas gracias por acordarte de nosotras”. Sonia siempre fue y, supongo sigue siendo, tan enigmática. No sé cómo se tomarán volver a esos años, ha pasado bastante tiempo. Tal vez no quieran recordar esa etapa de sus vidas o, a lo mejor, sí. No lo sé. En cualquier caso, si me piden un ejemplar se los enviaré, por supuesto. Pero tiene que nacer de ellas.
2. Pasaron 5 años entre tu debut Barcelona Inconclusa y tu nueva novela. ¿En qué etapa como escritor te toma esta nueva publicación?
Menos ansioso y, espero, más maduro. Y con ganas de que el libro llegue pronto a Argentina.
3. ¿Te preocupa ser más leído en Argentina que en España? Imagino que te gustaría presentar tu libro en Argentina. ¿Sientes que has heredado algo de la tradición literaria de tu país?
No me preocupa ser más leído en uno o en otro país. Como escritor que escribe en lengua castellana pretendo que me lea cualquier persona que hable la misma lengua y que le interese el tipo de literatura que hago o las historias que cuento, independientemente del país en el que viva. Pero sí me gustaría que el libro empiece a circular en mí país, desde luego. Estuve hace poco en Argentina y hay muchas amigas y amigos, familiares, gente que quiero y admiro que está esperando el libro. Y me interesa poder presentarlo allá como hice con Barcelona inconclusa en su momento. Pero también en Perú, Colombia, Chile, Ecuador y todos los países de habla hispana, desde luego.
5. ¿Qué tal ha sido trabajar todo este tiempo con la Editorial Candaya? Imagino que te afectó el fallecimiento de Paco Robles
He aprendido mucho con Candaya en todos los sentidos en los que uno puede aprender y crecer como escritor. No tengo palabras para agradecer a Olga y a Paco todo lo que han hecho por mí en estos años, el amor y el cuidado que pusieron en mis libros, su calidad humana, su apoyo y compañía. Con Paco se fue un amigo, no solo un editor. Un tipo con un talento enorme y un sentido del humor único. Todos lo que lo conocimos y compartimos momentos con él podemos sentirnos unos auténticos afortunados. “Me enamoré de una leyenda”, escribió Olga tras su muerte. Una leyenda que sigue viva.
6. La publicación de Casa de Nadie te ha significado una agitada agenda de presentaciones. ¿Crees que esta novela ha significado tu consagración en el mercado español?
Me cuesta pensar mi trabajo como escritor en términos consagratorios. Preferiría hablar de una cierta satisfacción de saber que el libro se está leyendo bastante en muchos ámbitos, que habrá una segunda edición muy pronto y que en toda esta larga ruta de presentaciones ha recibido lecturas muy diversas y que han motivado conversaciones muy enriquecedoras.
7. ¿Qué pueden esperar los lectores que se acerquen a Casa de Nadie? ¿Intimidad, voyeurismo?
Una historia de prostitución no demasiado habitual o que transcurre por terrenos pocos recorridos dentro de esta tradición literaria. La intimidad que encontrará es la de un piso compartido con todas las alegrías y tristezas de dos mujeres que trabajan de prostitutas, no la intimidad del trabajo sexual propiamente dicho. Nunca las vi teniendo sexo con un cliente y eso nunca aparece en la novela. El voyeurismo que hay en Casa de nadie es el del camerino de la prostitución: cómo se visten y se maquillan, como salen de atender a un cliente, como reciben gente en casa para darles de cenar, qué medicamentos consumen. Ese tipo de cosas de unas bambalinas.
8. Tengo entendido que pasaron años para que empezarás a escribir esta historia. ¿En qué
momento y qué motivo a decidirte por escribir sobre tu experiencia con aquellas mujeres?
Siempre tuve la idea de escribir sobre ellas. Quizás la decisión final llegó cuando pude tomar la suficiente distancia con la historia que me tocó coprotagonizar y ver el marco más o menos completo como para poder escribir sobre Sonia y Jimena y también sobre mí.
9. Después de este libro ¿estás trabajando en algún nuevo proyecto?
Con mi pareja Marta Armingol, también escritora, estamos escribiendo un libro sobre los pueblos de colonización de España. Una vez acabado eso, que será antes del verano europeo, me meteré con dos proyectos personales: uno de ficción y uno de crónica. Pero no quiero decir mucho más porque no sé lo que tardaré en terminarlos. Lo único que puedo afirmar es que será mucho menos de lo que me llevó terminar Casa de nadie.
10. Eres un hincha confeso del Racing Club. ¿Qué te ha parecido la incorporación de Paolo
Guerrero a las filas del equipo? ¿Tienen chances de llevarse la Copa Libertadores?
Me encanta Paolo Guerrero y llegó con muchas ganas de ganar cosas con Racing. Eso, para cualquier hincha, es muy importante. La Copa Libertadores es muy jodida y este Racing de Gago es muy irregular así que no sé si tenemos chances, no me quiero hacer muchas ilusiones. Equipo para pelear tenemos. Lo que nos falta es soberbia de la buena, la de la convicción y el trabajo duro, no esa soberbia de la mala que es la que lleva muchas veces a menospreciar a los rivales. Eso lo debería arreglar el técnico. Si conseguimos cambiar esa mentalidad y si Gago pone más veces de titular a Paolo Guerrero, por ahí podemos dar alguna pelea en la copa.
11. Si tuvieras que comparar tu prosa con el estilo de juego o gambeta de algún futbolista.
¿Cuál sería?
Espero que tenga la fuerza, el ímpetu y lo impredecible de Licha López y la constancia y la regularidad de Aníbal Moreno. Y que, a veces, defina algunos párrafos fundamentales con la maestría de Rubén Paz.
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